Guanajuato, una joya colonial escondida en las montañas del centro de México, es famosa por sus callejuelas empedradas, casas coloridas y rica historia. Pero para aquellos que buscan algo un poco más… peculiar, hay un lugar que te dejará sin aliento: El Museo de las Momias de Guanajuato.
Este museo no alberga obras de arte tradicionales ni exhibe artefactos históricos comunes. En cambio, ofrece una visión única y a veces inquietante del pasado de la ciudad. Aquí encontrarás una colección sorprendente de momias naturales, preservadas por las condiciones secas y minerales únicas de los cementerios locales durante siglos.
Estas momias no son simples restos esqueléticos; muchas conservan su piel, cabello, ropa e incluso expresiones faciales, ofreciendo una ventana escalofriante a la vida en Guanajuato durante el siglo XIX y principios del XX. Imagina encontrarte cara a cara con un niño que parece dormirse eternamente o con un adulto con una mirada de sorpresa grabada para siempre en sus facciones. Es una experiencia que desafía las normas y te hace reflexionar sobre la naturaleza de la vida, la muerte y la memoria.
Pero, ¿cómo se formaron estas momias tan inusuales? La respuesta radica en el ambiente seco de Guanajuato y un proceso natural conocido como desecación. Las altas temperaturas del día combinadas con la baja humedad y la tierra rica en minerales de los cementerios locales contribuyeron a la deshidratación de los cuerpos, preservándolos durante décadas e incluso siglos.
En 1865, las autoridades comenzaron a exhumar las momias de un cementerio cercano para hacer espacio para nuevos entierros. La sorpresa fue grande al descubrir que muchos cuerpos se habían conservado de manera excepcional, manteniendo rasgos y detalles sorprendentes. Estas momias fueron trasladadas a la capilla del antiguo convento de San Francisco, donde se exhibieron por primera vez al público en 1908.
El Museo de las Momias de Guanajuato alberga una colección de más de 111 cuerpos momificados, cada uno con su propia historia. Puedes leer sobre sus vidas, profesiones y causas de muerte, lo que te ayuda a conectar con estas personas del pasado de una manera única e íntima.
La experiencia sensorial del museo:
- Vista: Las momias conservan sorprendentemente detalles de su apariencia original, desde la textura de la piel hasta el cabello y la ropa.
- Olfato: A pesar de estar en un ambiente controlado, el olor a formaldehído puede ser perceptible en algunos rincones, recordando la naturaleza inusual de la colección.
Más allá de las momias:
El Museo también cuenta con información histórica sobre la ciudad, las costumbres funerarias del siglo XIX y los procesos científicos detrás de la momificación natural. Es un lugar ideal para aprender sobre la historia de Guanajuato desde una perspectiva diferente.
Información práctica:
- Dirección: Calle Jiménez, No. 18, Guanajuato Gto.
- Horario: Lunes a domingo, de 9:00 am a 6:00 pm
- Costo de entrada: $85 pesos mexicanos (aproximadamente $4 USD)
Recomendación especial:
Para una experiencia más completa, considera contratar una guía bilingüe. Estas guías ofrecen información detallada sobre las momias y sus historias, enriqueciendo tu visita.
El Museo de las Momias de Guanajuato es un destino único que desafía las expectativas y ofrece una perspectiva fascinante sobre la historia y la cultura mexicana.
Es recomendable:
- Llevar calzado cómodo para caminar por los pisos empedrados del museo.
- Tomar agua durante la visita, especialmente en días calurosos.
- Tener en cuenta que algunas personas pueden sentirse incómodas con la naturaleza de la colección. Si tienes sensibilidad a las imágenes macabras, es posible que quieras reconsiderar la visita.
Si estás buscando una experiencia diferente y memorable en Guanajuato, El Museo de las Momias te dejará sin aliento. Es un viaje a través del tiempo y una oportunidad para reflexionar sobre la fragilidad y la belleza de la vida humana.